Los hábitos saludables comienzan el 7 de enero, y los terminamos el 31 del mismo mes; entonces esto…. no son hábitos saludables.
Los mejores hábitos, como la palabra indica, deben ser aquellos que pasan a formar parte de nuestras rutinas diarias y habituales.
Hay quien habla de la regla de los 21 días para que algo se convierta en un hábito, que no es más que hacer algo durante 21 días seguidos, sí seguidos… sino, volvemos a empezar a contar. La repetición es la clave, para que se convierta en un nuevo hábito.
Por ejemplo, empieza por beber un vaso de agua por las mañanas en ayunas. O algo más complejo, encontrar media hora cada día para ti, para hacer deporte, para cuidarte.
Comienza poco a poco. Nada de excusas, define tu propio plan. Establece recordatorios y avisos. Crea tus rituales a la hora de realizar la actividad. Lleva un control de los progresos. Celebra tus logros, establece tu propia recompensa para seguir avanzando.
¿Por dónde vas a comenzar? ¿Por hacer 30 minutos de running o 30 minutos de abdominales?
Sea cual sea el hábito que elijas, siéntete bien durante el proceso. He comenzado de nuevo a correr y hay una frase que se repite a menudo en mi cabeza, pues al hacer una carrera no me gusta entrar en última posición, pero me digo “Si, llegué en última posición, pero por delante de los que ni siquiera se atrevieron a hacerla” y eso me da fuerzas para seguir “sufriendo” en el proceso de volver a correr.
¿Sábeis que me ayuda?
- Llevar ropa nueva (mallas, camiseta, sudadera….), es como una motivación extrínseca.
- Ponerme mi música favorita, es como un ritual previo: ropa, cascos y adelante!
- Contra las agujetas, más agujetas!
- Mi propia botella personalizada
Y tú, ¿te apuntas a crear hábitos saludables?
